Después de años en la profesión he llegado a una conclusión, a priori bastante simple, pero que suele pasar la prueba del algodón y que vale en general para todos: la mayoría de los responsables de marketing no entienden cómo funciona la comunicación.
Sin embargo, es verdad que cada vez valoran más los resultados que las agencias de relaciones públicas podemos alcanzar a la hora de diseñar y ejecutar la estrategia de publicidad de la marca.
Una cosa es evidente: nadie como nosotros conoce mejor sus mensajes, posicionamiento, objetivos y estrategia. De ahí que las agencias de comunicación seamos cada vez más una pieza clave a la hora de definir los planes estratégicos.
El tono, el lenguaje, los códigos implícitos cuando se “venden” las historias a los medios de comunicación. Desde un reportaje en prensa, pasando por un informativo de televisión, hasta la participación en un bazar de producto, un concurso, la gestión de redes sociales… todo forma parte de un trabajo de orfebrería profesional que se escapa en muchas ocasiones a los responsables de marketing.
Es una de las causas por las que los eventos organizados por equipos creativos de agencias publicitarias o equipos puramente marketinianos, con presupuestos muy superiores, no funcionan si no incorporan a los equipos de comunicación desde el principio.
Y el problema es que, muchas veces – más de las deseadas – cuando nos incorporan es demasiado tarde, porque están viciados desde su concepción. En muchos casos tendrán una pátina excesivamente comercial, que lo harán fracasar en la explotación informativa del mismo. Señores de marketing: nunca solos y siempre de la mano.
Además, la importancia cada vez mayor del contenido informativo en la comunicación comercial, donde se busca una manera diferenciadora de llegar a la gente, es un factor que nos acerca a las agencias de relaciones públicas a una comunicación más directa, personalizada y auténtica.
No lo olvidemos: los profesionales de nuestro sector, muchos de ellos periodistas, somos trovadores, y sabemos crear y contar buenas historias.
*Columna escrita por Jorge Peidró, director general de Peidró Comunicación, y publicada en el nº 394 en papel de El Publicista.